Embotelladora de Canarias nació en 1956, lo que la convierte en una empresa veterana en el sector de la distribución alimentaria en las islas. Su objeto inicial fue la fabricación y distribución de bebidas refrescantes. En la actualidad su oferta se compone tanto de marcas propias como Clipper, como de marcas fabricadas bajo licencia de Pepsico y Schweppes y el resto lo componen marcas con los que mantiene acuerdos de distribución exclusiva para Canarias. Esto la lleva a estar presente en múltiples segmentos de mercado tales como cervezas, aguas minerales, zumos, batidos, leches, vinos, destilados y bebidas de nueva generación.
Su facturación anual se encuentra en torno a los 70 millones de euros en 2011 y tiene presencia en la casi totalidad de los 16.000 clientes censados en las islas entre alimentación y HORECAS. Su estrategia comercial consiste en preventa y distribución física en 24 horas con un equipo comercial compuesto por unas 100 personas repartidas por 9 centros distribuidores lo que le permite mantener una frecuencia de visita semanal por cliente en las 7 islas.
Embotelladora de Canarias mantiene una preocupación constante por la mejor contínua, la caliddad y la seguridad alimentaria, lo que la lleva a estar certificada por los principales organismos como ISO (Inocuidad de los alimentos), BRC (British Retailes Consortium) o AIB (International Consolidated Standards for Beverages Facilities Programs).